10 mamás animales sorprendentes

El instinto maternal, tanto en el caso de los seres humanos como en el caso de los animales, hace que las madres saquen lo mejor de ellas mismas para cuidar, proteger, alimentar y sacar adelante a sus hijos.

¿Quieres conocer algunos ejemplos de asombrosas madres del reino animal?

¡Pues vamos a ello!

 

Cigüeña

Al contrario de lo que suele suceder entre la gran mayoría de las especies animales, las cigüeñas machos y hembras se alternan en el cuidado y en la búsqueda de alimento para sus cigoñinos. ¿Curioso y ejemplar, verdad?

 

 

Cocodrilo

La hembra del cocodrillo hace nidos 100% ecológicos, los traslada entre sus puntiagudos dientes y los defiende “contra viento y marea” de cualquier amenaza, por este motivo, es una de las etapas más mortales para este reptil.

El calor que el nido desprende es suficiente y no es necesario que la madre se siente sobre sus huevos para calentarlos.

Hay científicos que han utilizado unos termómetros especiales para observar la fase de incubación y han descubierto que el calor posibilita que los embriones se desarrollen hasta romper el cascarón y, además, si la temperatura es inferior a 31 grados se sabe que nacerá una hembra y si supera los 32, un macho.

Cuando los bebés nacen, las madres los llevan dentro de la boca durante los primeros años de vida para protegerlos.

 

Elefante

Las elefantas jóvenes ayudan a otras para criar a sus pequeños elefantes, así se asegura la vida de éstos mientras los padres van a buscar comida. Este gesto sirve, además de para cuidar a los bebés, para entrenar a las hembras en su futuro rol de madre.

Las crías de elefante son las crías terrestres más grandes a nivel mundial, pesan alrededor de 90 kg. y las elefantas aguantan 22 meses de embarazo, el más largo de todos los mamíferos.

 

 

Elefante marino

Durante el embarazo, la hembra del elefante marino se alimenta mucho más. La gestación dura 11 meses, pare sólo una cría que pesa unos 35 kg. y le da de mamar durante un mes.

La leche contiene tanta grasa que el bebé gana unos 4,50 kg. al día. Al contrario que su progenitora que no se alimenta y, al terminar la lactancia, ha podido perder hasta 130 kg.

 

Gacela 

Cuando nacen, la hembra de este antílope resguarda a sus crías bajo hierbas altas y ella sale a despistar a los depredadores. Aunque los animales están en un estado de vigilancia permanente, la gacela únicamente duerme una hora al día y en períodos de tiempo cortos. 

 

 

Guepardo

La hembra del guepardo protege y vela por sus cachorros entre un año y un año y medio. Durante estos meses, les adiestra en la caza y en otras destrezas imprescindibles para sobrevivir.

 

Koala

Llamativamente, la mamá koala se alimenta de hojas venenosas de eucalipto durante el embarazo. No es peligroso para ella porque su intestino está repleto de bacterias que desintoxican las hojas.

Las crías no nacen completamente desarrolladas y no cuentan con esas bacterias, así que las madres las alimentan con sus propias heces que no están intoxicadas e incorporan todos los nutrientes de la planta.

 

 

Oso panda

En la mayoría de los casos, las osas panda paren dos cachorros e inmediatamente, tras el parto, escogen a uno como su favorito y lo miman y cuidan mucho más que al otro. La elección no está hecha con malicia ni egoísmo, está motivada porque la madre no puede garantizar la supervivencia de los dos y el oso favorito podrá enseñarle a su hermano cómo sobrevivir a las adversidades de la jungla.

 

Pulpo

La hembra del pulpo produce, nada más y nada menos, que entre 50.000 y 200.000 huevos. Durante el período de gestación, en torno a cuarenta días, genera corrientes de agua sobre los huevos para oxigenarlos y disminuye sus funciones básicas al mínimo, ni siquiera caza. A veces, puede llegar a comerse sus propios tentáculos para que sus crías sobrevivan. Al nacer éstas, no puede soportar su debilidad y muere.

 

Salamandra negra alpina

¿Sabéis cuál es el período de gestación de este anfibio? ¡3 años y 2 meses! ¡Alucinante!

Viven en los Alpes Suizos, miden 15 centímetros y dan a luz a una o dos crías totalmente desarrolladas. La madre pone 30 huevos intrauterinos aproximadamente, pero la gran mayoría sirve como alimento a los pocos que nacerán.

 

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