El mapa de la intensificación ganadera en España: Un análisis de la evolución y desafíos

La ganadería ha sido una actividad fundamental en la historia de España, con un legado arraigado en la cultura y la economía del país. Sin embargo, en las últimas décadas, hemos sido testigos de una notable transformación en la industria ganadera, por una creciente intensificación de la producción animal.

La demanda de productos cárnicos y lácteos ha impulsado el desarrollo de granjas con una alta concentración de animales y mayor productividad, superando en muchos casos a la ganadería más tradicional. En este artículo, exploraremos el impacto de esta intensificación en el medio ambiente, examinando las preocupaciones ambientales y los desafíos asociados a este cambio en el panorama ganadero.

 

1. La evolución de la intensificación ganadera en España:

La intensificación ganadera se refiere a la adopción de tecnologías y prácticas que aumentan la producción animal en un espacio y tiempo determinado. En España, este proceso ha experimentado cambios significativos a lo largo del tiempo. Tradicionalmente, la ganadería se caracterizaba por sistemas extensivos, donde los animales pastaban libremente en grandes extensiones de tierra.

Pero, actualmente el aumento de la concentración de animales en granjas ha llevado a la expansión de lo que algunos llaman "macrogranjas" o "ganadería industrial", recogido como "ganadería intensiva" por la legislación. Estas explotaciones se caracterizan por la alta concentración de animales por hectárea que pasan toda su vida en establos y se alimentan con piensos. Esta forma de producción ha sido exitosa en regiones del centro y noreste peninsular, especializándose en la producción de carne de cerdo y leche de vaca.

 

2. Impacto en el medio ambiente:

La intensificación ganadera ha generado preocupaciones ambientales significativas. El aumento de la concentración de animales en granjas ha llevado a una mayor generación de residuos y emisiones de gases de efecto invernadero, como el metano y el óxido nitroso. La concentración de animales en pequeñas áreas también ha incrementado el riesgo de contaminación del suelo y el agua debido a la acumulación de purines, lo que plantea desafíos para la gestión adecuada de los residuos.

 

3. Bienestar animal:

El bienestar animal es otro aspecto importante a considerar en el mapa de la intensificación ganadera. El hacinamiento y las prácticas intensivas pueden afectar la calidad de vida de los animales, lo que puede tener repercusiones en la salud y la calidad de los productos finales. Por ello, es fundamental promover el cumplimiento de normas y regulaciones que protejan el bienestar animal y fomentar prácticas éticas en la ganadería.

 

4. Crecimiento de la intensificación ganadera:

El análisis de datos del Sistema de Trazabilidad Animal (SITRAN) recogidos por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) revela un crecimiento del 9% en la concentración de animales en granjas desde 2015, especialmente en el caso de cerdos y vacas. Esto se traduce en la presencia actual de aproximadamente 3 millones más de animales que en 2015, mientras que el número de granjas de ganado ovino, caprino, porcino y bovino ha disminuido en 11,000 unidades.

 

5. Diferencias regionales:

El modelo intensivo ha prevalecido en algunas regiones del centro y noreste de España, mientras que comunidades situadas en el noroeste y sureste tienden a una menor concentración de animales en las explotaciones. La situación varía según la idiosincrasia del animal y del territorio, lo que refleja la complejidad y diversidad de la ganadería en España.

 

6. Desafíos y perspectivas futuras:

El crecimiento de la intensificación ganadera plantea desafíos para la sostenibilidad y el bienestar animal. Muchos pequeños ganaderos se enfrentan a dificultades para competir en el mercado debido a la proliferación de granjas intensivas. Además, existe preocupación en algunas comunidades sobre los impactos ambientales y el potencial conflicto entre la ganadería intensiva y la protección del medio ambiente.

Es crucial abordar estos desafíos mediante el desarrollo de políticas que fomenten prácticas agrícolas más sostenibles y responsables. Es importante considerar el bienestar animal y la calidad del medio ambiente, al mismo tiempo que se respalda a los pequeños ganaderos y se promueve el consumo consciente y sostenible de carne. La colaboración entre el Gobierno central, las comunidades autónomas, las organizaciones ambientales y los propios ganaderos es esencial para lograr un equilibrio entre la intensificación ganadera y la preservación del medio ambiente en España.